Es una garza grande y robusta de color general gris, de vuelo pesado y, cuando se alimenta más solitaria que otras garzas.
En los últimos años sus poblaciones parecen tener cierta mejora y en lo que concierne a Mallorca, es cada vez más habitual verlas a lo largo de todo el año.
De entre las garzas grandes, es quizás la más ruidosa, especialmente durante la migración cuando los pequeños grupos o garzas reales solitarias van emitiendo su voz para incitar a otros ejemplares a unirse a ellos en los viajes migratorios.
Para alimentarse permanece estática durante largos periodos de tiempo con parte de las patas metidas en el agua, para lanzar su pico como si fuera un arpón ante l
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Es una garza grande y robusta de color general gris, de vuelo pesado y, cuando se alimenta más solitaria que otras garzas.
En los últimos años sus poblaciones parecen tener cierta mejora y en lo que concierne a Mallorca, es cada vez más habitual verlas a lo largo de todo el año.
De entre las garzas grandes, es quizás la más ruidosa, especialmente durante la migración cuando los pequeños grupos o garzas reales solitarias van emitiendo su voz para incitar a otros ejemplares a unirse a ellos en los viajes migratorios.
Para alimentarse permanece estática durante largos periodos de tiempo con parte de las patas metidas en el agua, para lanzar su pico como si fuera un arpón ante la cercanía de sus presas. Ocasionalmente utiliza las zonas de costa arenosa o de rocas bajas para alimentarse, especialmente por la noche.
LA GARZA REAL EN CALVIÀ: Es menos selectiva que otras garzas, se presenta más distribuida por el municipio, utilizando desde lagunas interiores artificiales en los golf de Santa Ponça hasta la orillas de playas como la bahía de Santa Ponça. La pequeña zona húmeda de Magaluf acoge en ocasiones a ejemplares solitarios.
En migración puede verse al atardecer en pequeños bandos casi en cualquier lugar del término.
LAS MEJORES ÉPOCAS PARA OBSERVARLA: Las observaciones recogidas parecen mostrar que se presenta en Calvià durante ambos pasos migratorios, aunque en mayor número tanto de ejemplares como de citas, en el paso postnupcial.
Los meses de Septiembre y Octubre son los más adecuados, pero se han realizado detecciones a lo largo del mes de Noviembre y a finales de Abril, estas últimas en pleno movimiento prenupcial.
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