En algunas localidades del continente europeo puede formar agrupaciones muy importantes principalmente en invierno, aunque en las Islas Baleares podríamos decir que la invernada de silbones europeos es sólo moderada y relativamente concentrada en unos pocos humedales.

Esta anátida de tamaño mediano, y cuyos machos presentan en el píleo y la frente una mancha amarilla sobre una cabeza de tonos marrones, a veces visible a cierta distancia. Se alimenta en ocasiones en áreas encharcadas y lodazales o en áreas de herbáceas cercanas a las láminas de agua donde parece pastar entre la vegetación.

En Baleares se comporta como invernante y migrante en las cuatro islas mayores aunque con diferentes grados de abundancia.

El silbón europeo en Calvià

Como para otras muchas aves acuáticas, el municipio no disfruta de zonas húmedas de cierta relevancia y por tanto las observaciones proceden en su totalidad de lagunas artificiales en campos de golf, principalmente los más cercanos a Santa Ponça.

No obstante, debemos decir que no resulta una especie abundante en el municipio  y que de momento las citas acumuladas son pocas.

Las mejores épocas para observarlo

Todas las observaciones parecen coincidir con fechas de migración tanto postnupcial, concentradas en el mes de octubre, como algo tempranas en la migración primaveral, ya que se producen a principios de febrero. Sin embargo el hecho de que no existan citas de los meses de noviembre, diciembre y enero nos lleva a pensar en que se trata de aves en dispersión o migración.

El telescopio puede ayudar a ver a estas aves desde cierta distancia sin perturbar su tranquilidad.