Es un zorzal de gran tamaño, dando la apariencia de que lo es todavía más cuando esta posado, pues mantiene una postura muy erguida y con la cabeza normalmente algo levantada, mostrando las grandes manchas oscuras del pecho y la garganta blanca.

Es menos asustadizo que otros zorzales, aunque como siempre en esta familia de aves, los hábitos huidizos permanecen.

En invierno, cuando visita nuestras islas, forma bandos más pequeños que otros zorzales y no suele mezclarse con otras especies, alimentándose en zonas de claros o herbazales cercanos a bosquetes o áreas de garriga alta.

Incluso en la temporada de invierno, emite, especialmente cuando alza el vuelo, un reclamo que pudiera recordar un áspero traqueteo.

En Baleares se comporta como invernante en Mallorca, Menorca y Eivissa y como migrante a través de las cuatro islas mayores.

El zorzal charlo en Calvià

Es una especie más bien forestal que utiliza preferentemente las áreas del norte del municipio, especialmente aquellas de sierra o pie de sierra. Los itinerarios más aconsejables para intentar localizar a esta especie son los dos de la sierra de Na Burguesa, tanto el de el Coll de Sa Creu como el de Bendinat.

Las mejores épocas para observarlo  

Se presenta casi exclusivamente en invierno en el municipio o al menos eso es lo que se desprende de las escasas citas acumuladas. Los meses de diciembre y enero son los más adecuados.

Como siempre que intentamos observar zorzales, debemos tener paciencia pues se trata de especies muy tímidas que huyen a la menor señal de alarma.